En Turquía se realizan diez veces más procedimientos de cirugía plástica que en Europa o América. A lo largo de los años, otros subsectores que apoyan la cirugía plástica han avanzado significativamente. El costo de una mamografía en Turquía equivale a un tercio de los de EE. UU., Canadá, los Estados del Golfo y la mitad de los de Europa.
Estambul es también uno de los destinos turísticos más importantes. Como resultado, brinda a los pacientes la oportunidad de realizar excursiones turísticas y culturales.
Los pacientes pueden concentrarse en sus tratamientos porque los paquetes de cirugía mamaria con todo incluido les evitan tener que lidiar con otras tareas innecesarias (alojamiento, traslado, etc.).
Una vez seleccionado el implante a utilizar, el cirujano realizará, según corresponda, una incisión en el pliegue debajo de la mama, debajo del brazo o alrededor del pezón.
El tejido mamario se separa de los músculos y el tejido conectivo del tórax después de la incisión. Delante o detrás del músculo más externo de la pared torácica, se forma un bolsillo. Luego se centra el pezón y se inserta el implante en este bolsillo.
Se utilizan implantes de solución salina y silicona. Los implantes salinos son dispositivos huecos. Después de la inserción, se usa solución salina estéril para llenarlos. Por el contrario, los implantes de silicona se insertan llenando previamente la cavidad con gel de silicona.
Técnica de incisión inversa: el cirujano realiza una incisión en forma de T en la parte inferior del tórax. La grasa extra se corta del tejido mamario. Después de sellar la incisión, el procedimiento finaliza.
Técnica de “piruleta”: El cirujano mueve el pezón con un movimiento circular mientras realiza incisiones. Se corta el tejido sobrante. El cirujano puede levantar el pezón si es necesario. El procedimiento finaliza después de insertar un drenaje para evitar que se acumule líquido y sangre en el tórax.
Es crucial realizar el procedimiento de cierre sin dañar los conductos galactóforos. El paciente debe permanecer en el hospital durante un día después de la cirugía antes de que se le permita ser dado de alta porque el drenaje se retira un día después. Después de la cirugía, los pacientes deben tomar al menos una semana para recuperarse en casa. Al final de la primera o segunda semana después de la cirugía, se retiran los puntos y el paciente puede reanudar sus actividades normales. En el primer año, algunos pacientes pueden presentar leves molestias.
Puede elegir implantes de forma redonda si está cansada de usar un sostén de apoyo y quiere senos más llenos y voluminosos. Los implantes de lágrima serían preferibles si desea una apariencia natural de los senos.
El rango de edad sugerido es entre 18 y 50 años. Los pacientes menores de 18 años aún pueden recibir un aumento de senos si les genera problemas psicológicos. Si pasan los exámenes de salud requeridos y los cirujanos dan su visto bueno a la operación, los pacientes mayores de 50 años también pueden realizarse este procedimiento.
Por lo general, toma de dos a tres horas, aunque el tiempo depende de la condición del paciente.
No, el aumento de senos durante el embarazo está estrictamente prohibido.
Las prótesis de silicona se colocan debajo del seno, por lo tanto, ni siquiera entran en contacto con los conductos lácteos. Debido a esto, no es posible dañarlos en este procedimiento. Cuando se extrae tejido mamario durante los procedimientos de reducción mamaria, existe la posibilidad de que los conductos lácteos se dañen. Sin embargo, si el procedimiento lo realiza un cirujano experto, esta posibilidad puede reducirse.
Una prótesis mamaria suele durar entre diez y quince años. Es seguro asumir que es un proceso permanente como resultado.
Según investigaciones, tal posibilidad es extremadamente improbable.